Planos gastronómicos I

Richard Neutra. Ingredientes básicos de la arquitectura

Richard Neutra establece como elementos principales definitorios de la arquitectura dos planos horizontales: el primero, elevado, físico, proporciona cobijo frente a los rigores atmosféricos, además de acotar el espacio abierto en atmósferas de escala humana. El segundo, la sombra proyectada por el anterior sobre el suelo, representa de manera inmaterial una zona de protección. Su extensión de la sombra, como una mancha protectora, -pigmentación del pavimento- establece los límites de la zona de confort frente a un entorno ajeno y regido por otras leyes.

El plano de la sombra como ámbito de protección, a través de la reinterpretación de las propiedades de elevación y contorno que lo caracterizan, puede evolucionar hacia elemento de arquitectura del ritual gastronómico para dar soporte funcional y relacional a los comensales; la comida, en términos generales, se desarrolla, habitualmente, alrededor y sobre un plano que responde a diferentes cotas en función de las variantes culturales a las que pertenece. Se trata, en definitiva, del plano gastronómico de la mesa.

En la cultura occidental el plano gastronómico se considera funcional cuando responde a una altura aproximada de 70cm y, este caso, debe convivir con la silla, que mantiene al hombre alejado del suelo y facilita el movimiento de sentarse a comer haciéndolo más cómodo en términos de desplazamiento vertical, y permite la relación visual directa con quienes circulan  a su alrededor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario