Tableaux-pièges

 Spoerri con Tableau-piège al fondo. Restaurant Spoerri. 1968 | Daniel Spoerri. Eaten by Marcel Duchamp. Tabeau-piège. 70x60. 1964

La sala del restaurante de Daniel Spoerri en Düsseldorf, inaugurado en 1968, se configuraba como el punto donde confluían las energías de las vanguardias artísticas de la ciudad: cubriendo las paredes, papel, que no era más que la correspondencia que mantenía el artista con otros colegas en la creatividad, y, por encima de esas cartas que se constituían en una especie de fondo, las célebres Tableaux-pièges de Spoerri, piezas a medio camino entre arquitectura y gastronomía que representaban una de las manifestaciones artísticas que tenían lugar en el local:

Cuando los comensales terminaban de comer se levantaban, permaneciendo la mesa tal cual éstos la habían dejado para, a continuación, proceder Spoerri a fijar todos y cada uno de los cubiertos, utensilios, restos de comida, etc. –en definitiva, todo lo que sobre ella hubiera quedado- sobre el tablero.

Posteriormente, éste se instalaba en posición vertical sobre las paredes de la sala de tal forma que la Tableau-piège quedaba expuesta, verticalmente, como la representación del instante final congelado del ritual gastronómico que había tenido lugar. Aunque, en realidad, no eran tanto el último fotograma congelado sino una topografía del tiempo de la comida, relieves, planos, maquetas, tiempos, historias de lo que sobre y en torno a la mesa había ocurrido. En definitiva, cada Tableau-piège suponía el proyecto específico –entendido ya como proyecto arquitectónico- de un ritual gastronómico.